Qué bien para nuestro turismo contar con un gran congreso sanitario aunque tengamos que sufrir declaraciones trasmitiendo las bondades de su política sanitaria y el maravilloso futuro que le espera al Complejo Hospitalario de Salamanca. Las elecciones están próximas y las promesas reaparecen nuevamente.
Dice Antón, y es verdad, que el sistema sanitario actual es excelente, equitativo y solidario pero y ¿cómo dice Lamela que el modelo es ya prehistoria y un mal servicio al ciudadano?, que hay que cambiarlo y buscar nuevos sistemas de organización y financiación (¿privatización?).
Reanudan su anuncio del Plan Director (prometido con alharacas hace SOLO…3 AÑOS). ¿Dónde está el presupuesto? ¿nos mantendrán entretenidos con modestas obras demorando la solución del día a día otra legislatura?. En esta columna aplaudimos el proyecto (21/4/01) que se presentó como inminente.
Las transferencias sanitarias del INSALUD de Aznar al Sacyl “eran muy generosas” pero no presupuestaron una sola peseta para nuevas obras en Salamanca, cosa que no sucedió en Valladolid, León o Zamora… donde prácticamente se dotan nuevos Hospitales. Ahora las reconocen insuficientes y con desigualdades presupuestarias evidentes por lo que continuará la trasferencia… hacia la privatización.
Mientras Salamanca pierde ranking sanitario y sus exportaciones y posición económica en la comunidad se debilitan, nuestros políticos con su inefable alcalde a la cabeza se dedican a estimular el nacionalismo salmantino y luchar por los papeles del archivo. Anuncian futuros transplantes de Páncreas pero ya teníamos cirujanos con experiencia en el cardiaco y pulmonar y por eso… se autorizaron para Valladolid donde no tenían experiencia.
Una mejor gestión para impedir el deterioro de la Sanidad pública se sustituye por parte del gobierno regional por conciertos y gestiones privadas que aún no han demostrado ningún beneficio al usuario del sistema de salud.
Maximiliano Diego. El Adelanto 10 Junio 2006