Pasear una tarde de domingo por nuestra magnífica Plaza Mayor puede servirnos para ver la realidad demográfica de Castilla y más concretamente de nuestra ciudad. Si no queremos perdernos con los indicadores del estado de la población bastará con practicar este sencillo ejercicio que todos nuestros “avispados” políticos conocen muy bien, para darnos cuenta que Salamanca es una ciudad muy envejecida. De las tres variables que definen la población, a saber: Fecundidad, Mortalidad y Migración. Solo este último se escapa a los perfiles en los años venideros.
La máquina electoral se ha desatado y ha llegado el momento de decir lo bien atendidos que están nuestros mayores por los servicios municipales, autonómicos y estatales y con toda razón. En general podemos decir que nos les falta de nada: podología casi gratuita, servicio de comedor a domicilio, teleasistencia, asistencia jurídica especializada, etc,
Si profundizamos un poquito en los niveles de atención geriátrica a la población anciana podemos afirmar que existen lagunas muy importantes por cubrir.
Mi padre tiene 75 años, está bien de la cabeza, aunque presenta algunos olvidos, “propios de la edad”, se ha caído y ha sufrido una fractura de cadera hace poco pero la recuperación ha sido buena y ya camina con bastón, no oye bien, está operado de cataratas pero se defiende, ahora ha dejado de comer y apenas duerme¿A que médico lo llevo?. Esta pregunta de la vecina de casa es un caso cotidiano y la respuesta es sencilla: a su médico de cabecera.
Analizar las posibles variantes del caso práctico exceden los límites de esta columna. Los médicos de Atención Primaria reivindican 10 minutos para atender con dignidad a una persona. El tiempo para asistir a un anciano puede suponer una eternidad.
Si pasamos al segundo nivel de atención, el especializado, sencillamente no existe. La Geriatría no está contemplada en la cartera de servicios especializados del Sacyl.
Los recursos destinado a los mayores no podemos decir que sean escasos, son heterogéneos y están diversificados en un amplio abanico de instituciones, incluidos en centros, servicios y programas poco accesibles a la población a la que van destinados.
María Teresa Muñoz
Publicado en «El Adelanto», 21 Abril 2007