Etimológicamente, eutanasia no significa otra cosa que buena muerte, sin más. Así entendida la eutanasia, no puede por menos que ser una legítima aspiración de todas las personas. En este contexto, los profesionales de la salud estaremos obligados a ayudar a nuestros enfermos a que mueran bien.
La cosa se complica cuando se desvirtúa el término eutanasia. El primer requisito de la eutanasia es que tiene un carácter de voluntariedad, de lo contrario se trataría de un asesinato.
Algunas personas han llamado equivocadamente eutanasia pasiva a la decisión de no proseguir los tratamientos una vez establecido que no beneficiarán al paciente. No es eutanasia pasiva el hecho de no efectuar terapias desproporcionadas a algunos enfermos en determinadas situaciones. Respetar el proceso de morir es respetar al enfermo y es ejercer noblemente nuestra profesión.
Nuestra Comunidad ha resuelto el procedimiento regulador del Documento de Instrucciones Previas y se ha creado el Registro de Instrucciones Previas de Castilla y León, sin embargo ni los médicos ni los pacientes tenemos el hábito de ponerlo en práctica.
A nivel nacional se trata de mejorar la estructura de los Cuidados Paliativos y evitar desigualdades entre las distintas comunidades. Según algunos expertos en la Unidades de Cuidados Paliativos es extraordinariamente rara la solicitud de eutanasia. Esto nos tiene que llevar a la reflexión de la importancia de una buena atención cuando la muerte está cerca, donde la primera y última palabra la debe decir el propio enfermo.
El debate da para mucho y permanecerá abierto para los profesionales de la salud y para la sociedad en su conjunto.
María Teresa Muñoz. El Adelanto 18 Octubre 2008
La cosa se complica cuando se desvirtúa el término eutanasia. El primer requisito de la eutanasia es que tiene un carácter de voluntariedad, de lo contrario se trataría de un asesinato.
Algunas personas han llamado equivocadamente eutanasia pasiva a la decisión de no proseguir los tratamientos una vez establecido que no beneficiarán al paciente. No es eutanasia pasiva el hecho de no efectuar terapias desproporcionadas a algunos enfermos en determinadas situaciones. Respetar el proceso de morir es respetar al enfermo y es ejercer noblemente nuestra profesión.
Nuestra Comunidad ha resuelto el procedimiento regulador del Documento de Instrucciones Previas y se ha creado el Registro de Instrucciones Previas de Castilla y León, sin embargo ni los médicos ni los pacientes tenemos el hábito de ponerlo en práctica.
A nivel nacional se trata de mejorar la estructura de los Cuidados Paliativos y evitar desigualdades entre las distintas comunidades. Según algunos expertos en la Unidades de Cuidados Paliativos es extraordinariamente rara la solicitud de eutanasia. Esto nos tiene que llevar a la reflexión de la importancia de una buena atención cuando la muerte está cerca, donde la primera y última palabra la debe decir el propio enfermo.
El debate da para mucho y permanecerá abierto para los profesionales de la salud y para la sociedad en su conjunto.
María Teresa Muñoz. El Adelanto 18 Octubre 2008