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Los ciudadanos padecemos las listas de espera para ser atendidos en el sistema público de salud, para consultar , para ser operados, para realizar pruebas complementarias.
No todos los problemas de salud que nos aquejan pueden esperar el mismo tiempo para ser atendidos.
El paciente consulta a su medico de cabecera, quien valora la situación, es el profesional mejor situado del sistema para realizar esta tarea. En la mayoría de los casos resuelve el problema en su consulta, o decide remitir al paciente al especialista al necesario.
A partir de aquí el médico de familia pierde toda la capacidad de gestión del problema, será un administrativo del servicio de citaciones del hospital quien asigne la fecha de la consulta solicitada en base a una agenda-calendario. No hay ni criterios médicos en la asignación ni prioridades , sólo “huecos libres en las agendas de los profesionales” . De nada sirve la libre elección del medico consultor, puede ser que esté en consulta el día asignado o puede que no, tampoco es posible ejercerla con todos los médicos ni con todos los servicios. Las agendas se cierran por criterios desconocidos o el médico de cabecera no puede remitir pacientes directamente a consultar con algunas especialidades.
En Salamanca hay al menos un servicio, neurología, que se ha preocupado por solventar este problema; las citas se priorizan tras la lectura por un medico del servicio , del informe emitido por el médico de familia.
Las citas con los especialistas del hospital deberían gestionarse desde los centros de salud , ser los médicos de familia los encargados de decidir la prioridad de la atención , por ser quienes mejor conocen la situación de cada paciente y su problema de salud . Los ciudadanos acudirían menos a urgencias al recuperar la confianza en su médico de cabecera, que podría solucionarles los problemas o , si fuera necesario , remitirles a consulta al hospital con la premura que precisen y siempre , les podría solicitar las pruebas necesarias en cada caso.
Confíen en el médico de familia, incluso si son ustedes gestores del sistema sanitario público.

 

Emilio Ramos.

Pubicado en «El Adelanto», 24 Marzo 2007

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