El pasado 5 de octubre ha sido aprobada la Ley de Dependencia y por tanto todo parece indicar que se cumplirán los plazos previstos para comenzar su puesta en funcionamiento en enero del 2007.
Bienvenida a una Ley necesaria para regular las condiciones de vida de gran número de personas dependientes en nuestra Comunidad. A partir de ahora debemos contar con la inestimable colaboración de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades que será la encargada de adecuar la normativa a esta Ley en esta tierra, tan envejecida y donde queda mucho por hacer en materia social y sanitaria para atender las demandas reales de nuestros mayores.
En definitiva, se trata de configurar un nuevo desarrollo de los servicios sociales que amplíe y complemente la acción protectora del Sistema de Atención a la Dependencia, potenciando un modelo de Estado social acorde con otros países de la Unión Europea, potenciando el compromiso de todos los poderes públicos en promover y dotar de los recursos necesarios para hacer efectivo un sistema de servicios sociales de calidad y universales.
En este sentido, el Sistema de Atención a la Dependencia ahora creado es uno de los instrumentos fundamentales para adecuar la protección social a las personas en situación de dependencia y a la promoción de la Autonomía personal.
Sería una lástima desaprovechar esta oportunidad para hacer efectiva la coordinación socio sanitaria, asignatura pendiente de tantos planes socio sanitarios que permanecen en el tintero, también es una oportunidad para desarrollar el Plan de Atención Sanitaria Geriátrica en Castilla León, magnífico en su contenido pero carente de recursos y financiación para llevarlo a la práctica y que tendría que estar ejecutado en el 2007.
Las elecciones están sobrevolando el panorama de nuestros políticos y como las encuestas del Barómetro del SACYL indican que nuestra Sanidad va de maravilla sólo queda esperar los acontecimientos venideros.
María Teresa Muñoz. El Adelanto 14 Octubre 2006