Aunque algunos no acabamos de creerlo, dicen que en esta legislatura se llevarán a cabo las transferencias sanitarias pendientes, entre ellas la de nuestra Comunidad Autónoma. Aunque así no fuera, parece prudente ir haciendo el camino, trabajar en esa dirección, y en ello la máxima responsabilidad corresponde a la Junta de Castilla y León. Habría que ir valorando las necesidades que tenemos y los recursos materiales y humanos de que disponemos, e ir adaptándolos a la situación que se avecina. No parece que las cosas se estén haciendo así. Un ejemplo concluyente puede ser la alucinante situación de Los Montalvos, un centro hospitalario dependiente de la administración autónoma, situado en un paraje ideal y con una estructura física envidiable.
En un planteamiento de futuro en que toda la red sanitaria dependa de la Junta, este hospital sería el complemento ideal al Hospital Universitario. Este debería ser un hospital de agudos, que resuelva toda la atención especializada que demande la provincia, y de referencia para toda la comunidad en determinadas especialidades. El Hospital de Los Montalvos debería ser el complemento para aquellos enfermos que requieran estancias más prolongadas o crónicos.
Este planteamiento es el que desde nuestra asociación y desde otros ámbitos de opinión se viene reclamando desde hace años. La Junta, con concreciones prácticas, está demostrando que ha tomado la dirección contraria, y está convirtiendo aquél centro en una especie de batiburrillo de especialidades inconexas, que hacen difícil saber cual será el resultado final, en que van a convertir el centro. Lo grave del asunto es que tal vez con estas actuaciones se esté condicionando el futuro de la sanidad pública en nuestra provincia: la modernización de las estructuras del Hospital Universitario hace necesaria la existencia de un hospital de crónicos, y ese hospital está construido hace años, se llama H. Martínez Anido, pero todo el mundo lo conoce como Los Montalvos.
Aurelio Fuertes El Adelanto 21 abril 2000