¿Cuántos años de gobierno y cuántos votos se necesitan para atreverse a encarar una cuestión menor de tipo administrativo como es la reestructuración del mapa sanitario, que permita un mejor aprovechamiento de los médicos?
A falta del valor necesario para sacar con todas las de la ley una nueva distribución de recursos acorde con las necesidades reales, y ante la presión social por la falta de facultativos en los núcleos grandes, la Junta de Castilla y León ha firmado un acuerdo con los sindicatos para parchear la situación que consistiría en traer a la ciudad médicos de pueblos con muy pocos habitantes. No podemos estar en contra; cualquier cosa que venga a aliviar, una situación que es de escándalo, tiene que ser aceptada, aunque sea una chapuza y tenga por finalidad salir en prensa o como dicen, colocar a ciertas personas en determinados sitios.
El problema es si podrán sacarlo adelante como tal chapuza.
¿Aceptarán los médicos urbanos que les «quiten» parte de sus asegurados, es decir, de sus ingresos sin una orden que les obligue? y los rurales atender los pueblos que quedan vacantes? ¿y sus alcaldes?
¿Aceptarán los médicos con años de servicios no ser ellos los que ocupen unas plazas que en buena lid deberían salir a concurso de traslado?¿y los médicos de familia que se ocupen unas plazas que también podrían ser para ellos?
Hay muchos intereses, casi todos legítimos y es difícil que la cuestión cuaje, mientras tanto ahí están situaciones como la de Santa Marta. Y todo por la falta del valor necesario , no ya para gobernar, sino sólo para administrar…
Y cuando lleguen las elecciones a pesar de todo ¿se seguirá votando a Isabel La Católica?
Concha Ledesma. El Adelanto 19 febrero 2000