La Atención Primaria, descuidada desde hace años por las instituciones y sobrecargada por la pandemia actual, ha dejado al descubierto sus déficits en diversas escenas: una de ellas son las colas de pacientes (nunca mejor dicho lo de “pacientes”) frente a los Centros de Salud.
En estos días los periódicos locales nos han anunciado, dentro del Plan de Humanización del Sacyl, la instalación de carpas cerradas (o “módulos climatizados “ si queremos utilizar vocablos más sonoros) para aliviar estas esperas, que seguramente originarían más problemas clínicos a causa del frio y la humedad.
Pero no olvidemos que la instalación de dichas carpas no supone una solución al problema, sólo lo hace algo menos visible.
Agradecemos que se piense en la comodidad de los usuarios y/o pacientes pero creemos que sería necesario aplicar estrategias más eficaces para evitar estas escenas: ¿Y si mejorara la accesibilidad telefónica con más líneas y más personal que lo atienda?, ¿Y si aumentara el numero de médicos y enfermeras en los centros para recupera la atención a patologías no-covid? , ¿Y si….
Sobre este mismo asunto, el parcheo a las situaciones que visibilizan los déficits en nuestro sistema de salud, apareció otra noticia hace unas semanas, sobre el ofrecimiento por parte del Sacyl de un curso online de mindfulness para abordar el stress del personal sanitario. Iniciativa muy loable pero de la que desconocemos su incidencia y aceptación por un personal cuyo stress se debe a una sobrecarga en su trabajo y en sus horarios por escasez de profesionales.
Esperanza González Marín