Hoy celebra su fiesta de graduación la promoción de medicina 2004-2010 y, en primer lugar, quiero transmitirle mi felicitación por haber llegado al final del camino, salvadas las dificultades de sus 6 años de estancia en la Facultad de Medicina. Es posible que no se hayan cumplido los objetivos completos que se resumen en «saber, saber hacer y saber ser». A lo largo de los 4 o 5 próximos años, con el sistema MIR, confío en que podrán completar esa formación que les falta.
Permitidme, queridos alumnos, avalado por el derecho que me da haber sido elegido por vosotros padrino de la promoción, que os dé algunos consejos para lo mucho que os queda por delante hasta el día en que dejéis de ejercer esta profesión. Os recomiendo antes la lectura de la columna del sábado pasado de la Dra Mª Teresa Muñoz (El Adelanto, 1.5.10) en la que indica las características del médico del siglo XXI. Difícilmente voy a poder añadir algo nuevo.
Venís de un hospital sin objetivos docentes de pregrado claros y vais a llegar a un hospital con mejores o peores objetivos de postgrado donde pasaréis de discentes a docentes, primero con los estudiantes de medicina y posteriormente con los residentes más nuevos. Sed generosos en este punto, pues lo han sido con vosotros durante los años de la licenciatura, Sed generosos por ello y si no, para evitar la perpetuación del error.
No se si durante estos 6 años que habéis estado en las aulas hemos insistido lo suficiente (quizá haya sido sólo un poco) en la necesidad de la formación continua, que significa adquirir conocimientos día a día. Quisiera trasmitiros este interés por la autoformación ya que la carrera de medicina debe considerarse como una formación continua desde el primer curso de la licenciatura hasta la jubilación.
Vais a entrar en un sistema público para terminar vuestra formación. Con él tenéis que adquirir el compromiso de mantenerlo, mejorarlo y estar orgullosos de él. Felicidades de nuevo.
Pablo de Unamuno.El Adelanto 8 Mayo 2010