No creo posible que un servicio alcance unos objetivos mínimos, cualitativos y cuantitativos, sin reuniones de todo el equipo de trabajo que deben ser periódicas y programadas con contenidos y objetivos concretos que incluyan, según su finalidad, la discusión de casos clínicos, la toma de decisiones conjuntas sobre problemas asistenciales, la evaluación y el seguimiento asistencial y la formación continua.
Durante muchos años, los médicos, salvo casos esporádicos, han eludido los aspectos administrativos. Sin embargo, recordemos que uno de los objetivos de las Facultades de Medicina es la formación de médicos responsables de las consecuencias económicas de sus actos. Es necesario que los profesionales sanitarios vayan adquiriendo una cultura de gestión y familiarizándose con términos como: costo, EM (estancia media), GRD (grupo relacionado con diagnóstico), IC (índice de complejidad), IEMA (índice de estancia media ajustada), etc…
Los gestores de los hospitales han contado muy poco con los profesionales, que, además, tampoco se han preocupado de reclamar esta parcela. Hoy día las nuevas tendencias de gestión hace que este último aspecto sea una actividad obligatoria casi exclusiva de los profesionales. La interrelación de los profesionales sanitarios con los profesionales de gestión es imprescindible para conseguir los objetivos finales que son, curar la enfermedad y proteger la salud con el menor gasto posible.
Las reuniones de todo el equipo de trabajo es un aspecto muy importante, e imprescindible en la actividad de un servicio hospitalario y tienen las siguientes funciones: a) mantener la unión del equipo, b) facilitar la formación continua, c) recibir información de los diferentes pacientes que se atienden en el servicio, d) informar a todos los miembros del equipo de aspectos administrativos que conciernen al hospital y al servicio, e) elaborar y consensuar protocolos. Es función del responsable del servicio la programación y moderación de las reuniones de equipo.
PABLO DE UNAMUNO.
Publicado en «El Adelanto», 8 septiembre 2001